En un giro inesperado del destino, lo que comenzó como una genialidad cómica en los escenarios británicos de los años 70' se transformó en una rutina para aumentar la masa muscular y bajar de peso: la caminata Teabag.
Inspirada en el humor absurdo de los Monty Python y su emblemático sketch "Ministry of Silly Walks" (Ministerio de los Andares Tontos), esta peculiar forma de caminar despertó el interés de investigadores y entusiastas del fitness por igual, señala un artículo del sitio web El Español.
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Lo que comenzó como una burla ingeniosa a las formalidades burocráticas, pronto se convirtió en un catalizador para la innovación en el ámbito del fitness. La idea de que las formas de caminar extravagantes podrían tener implicaciones más profundas en la actividad física se apoderó de la imaginación de los investigadores.
Un grupo de científicos se propuso investigar el impacto de los distintos estilos de caminar en el gasto calórico del cuerpo humano, tomando como referencia las excentricidades presentadas en el sketch. Este estudio, realizado con 13 participantes de diversas edades, reveló descubrimientos sorprendentes.
Los participantes fueron invitados a imitar los andares del Sr. Teabag y el Sr. Putey, dos de los personajes principales del famoso sketch, durante al menos 30 minutos, en una pista. Se midieron diversos aspectos, incluido el consumo de oxígeno y la intensidad del ejercicio. Los resultados fueron reveladores:
Aunque el estilo de caminar del Sr. Teabag puede resultar poco práctico para la mayoría, los estudios sugieren que pequeños ajustes en nuestra marcha habitual pueden tener un impacto significativo en el gasto calórico.
Incrementar la intensidad de la caminata, ya sea aumentando la velocidad, el tiempo o el número de pasos diarios, es clave para la pérdida de peso.
Además, actividades como subir escaleras, llevar peso adicional o alternar pasos cortos con zancadas largas pueden aumentar aún más este beneficio, al tiempo que fortalecen los músculos y mejoran la resistencia cardiovascular.