Son múltiples los beneficios que aporta la sandía en materia de salud. Sin embargo, pocos conoce las ventajas que otorga al equilibrio del organismo consumir sus semillas, especialmente si se busca cuidar los riñones.
Algunas de las contribuciones que genera su ingesta están vinculadas a mejorar el funcionamiento del sistema inmunitario, reducir la hinchazón, fortalecer los huesos y hasta regular la presión arterial.
Por esta razón es que no se recomienda descartarlas al adquirir una sandía. Por el contrario, se pueden incorporar a la dieta diaria como parte de una infusión.
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Uno de los grandes aportes que tienen las semillas de sandía para el organismo humano los brinda a través de una infusión, y tiene que ver con la limpieza y desintoxicación del sistema renal.
Las mismas funcionan como un diurético natural, estimulando que los riñones se limpien al remover los materiales de desecho que suelen acumularse en sus tejidos.
Además, su ingesta conduce a que se incremente la producción de orina para regular los niveles de líquidos del cuerpo y, de paso, eliminar los metales pesados.
Entre los grandes atractivos que genera incorporar el té de semillas de sandía a la dieta diaria no sólo se destacan sus grandes beneficios en materia de salud, sino también su sencillez al momento de prepararlo.
El procedimiento implica una serie de pasos prácticos con tan sólo dos ingredientes, por lo que no debería presentar grandes complicaciones para quienes busquen consumirlo.
Para los interesados en consumirlo, se les aconseja beber la infusión en ayunas y esperar 30 minutos antes de ingerir el desayuno. Además, es recomendable consumirlo de 2 a 3 veces por semana.
Una alternativa para quienes buscan incorporar las semillas de sandía a su dieta diaria es comerlas como snacks o adicionarlas a otras preparaciones, como yogurt, ensaladas o sopas.
Uno de los tips esenciales para que las semillas queden con un mejor sabor, es tostarlas en el horno. Para eso, se pueden colocar sobre una fuente, cerca de 15 minutos a 160ºC.